El PSPV denuncia el vertido de 200 toneladas de escombros «ilegales» en Ribarroja

Los socialistas exigen que se tomen medidas. tc.c

Los socialistas exigen que se tomen medidas. tc.c
El PSPV de Riba-roja de Túria ha denunciado un vertido de más de 200 toneladas de escombros y desechos en una parcela privada del programa de actuación integrada (PAI) Mas de Baló, en el área este del término municipal junto a Loriguilla. Los vertidos ocupan una extensión de más de 2.000 metros cuadrados de extensión situados en una parcela privada frente al Mas de Mompó.

El vertido ilegal de escombros se ha producido, según los socialistas, en los últimos meses en la citada parcela privada sin la pertinente autorización municipal con el objetivo de sus autores de ahorrarse una suma importante de dinero en un centro que reúna las pertinente condiciones ambientales y urbanísticas. El vertido está compuesto de escombros procedentes de diversas obras y construcciones, además de otros tipos de desechos como plásticos, neumáticos, productos inflamables y objetos de grandes dimensiones.

El portavoz municipal del PSPV, Robert Raga, ha calificado de «errática» la política ambiental del alcalde de la localidad, Francisco Tarazona, del Partido Popular, por su nulo interés «en proteger y defender nuestro entorno, ya que en la zona donde se ha producido este vertido de enormes proporciones no existe ningún tipo de control por parte del consistorio, más pendiente de conceder permisos para desarrollar planes urbanísticos que de revisar e inspeccionar la finalidad de cada licencia municipal».

El grupo socialista considera que la capacidad del vertedero ilegal se ha colmatado poco a poco a lo largo de los últimos meses gracias a su situación geográfica -apartado del núcleo poblacional e industrial más próximo- y a la ausencia de personal por parte del consistorio dispuesto para su vigilancia y supervisión. El PSPV añade que esta situación «persiste desde hace ya muchos meses en esta zona que, por otra parte, está absolutamente olvidada por parte del Partido Popular que no tiene ningún tipo de interés por cuidarla y mejorarla».
Raga añade, además, que en esta zona «existe multitud de carencias en un PAI que en su día inició el ex presidente del Valencia Juan Soler con el beneplácito del alcalde de Riba-roja quien no opuso ningún tipo de resistencia a las políticas especulativas y depredadoras de un dirigente que dejó en bancarrota al equipo de fútbol de todos los valencianos y, a continuación, puso sus miras en nuestro municipio en su afán por obtener pingües beneficios económicos con estas operaciones urbanísticas; fruto de esas prácticas son las carencias que a día de hoy presenta este programa urbanístico»

El PSPV enumera algunas de las deficiencias que 11 años después presenta este PAI de Baló «como la inactividad de la depuradora de aguas residuales para el centenar de industrias de la zona a pesar de estar completamente concluida su construcción, la ausencia de un acceso directo a la Nacional III o la falta de soterramiento de la línea de media tensión que cruza toda la zona y que da servicio al pozo de agua potable que abastece a la vecina localidad de Loriguilla».

El portavoz socialista de Riba-roja censura también la falta de atención del gobierno municipal «por el ingente patrimonio histórico existente en la zona donde las masías del siglo XVII y XVIII, de propiedad municipal y privada, languidecen a marchas forzadas ante la pasividad de este equipo de gobierno quien demuestra, una vez más, una falta absoluta de interés por proteger y rehabilitar parte de nuestra historia; al ritmo que envejecen y se deterioran estas masías su futuro es muy preocupante si no se toman medidas inmediatas y decididas».

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