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La Asociación de Familiares de Víctimas del Frente de Levante es una entidad sin ánimo de lucro que nace «por la inquietud de un grupo, con actualmente 34 familias, pero en continuo crecimiento y repartidas por toda la geografía española, las cuales buscan a sus familiares desaparecidos o muertos durante la Guerra Civil Española en el Frente de Levante, entre las fechas aproximadas de abril de 1938 y el fin de la guerra (abril de 1939), entre la actual Comunidad Valenciana y Aragón», como han explicado fuentes de este colectivo.
Entre los objetivos de la asociación se encuentran «la investigación, búsqueda, exhumación e identificación de las víctimas y desaparecidos por causa de la Guerra Civil y la represión franquista en el Frente de Levante. Promover y coordinar investigaciones en estos campos, así como impulsar la colaboración con todas aquellas entidades que se ocupen de dicho tema. La búsqueda de justicia para las víctimas de la dictadura franquista».
En este sentido, la asociación espera de las Administraciones correspondientes que, en cumplimiento de la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura, y en base a los artículos 11, 12, 13 y 19, «colaboren en la obtención de nuestros objetivos y aporten ayuda económica en forma de subvención (artículo 11.2), para llevar a efecto dichos objetivos, y principalmente la localización de nuestros familiares, de manera que puedan ser enterrados dignamente junto a los suyos».
Desde la asociación han explicado que en estos momentos los restos de 28 soldados recuperados del Frente de Levante esperan para ser identificados (tras haber sido exhumados por el equipo de la Asociación Científica ArqueoAntro, en colaboración con el Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica de Valencia), y según recientes noticias, 14 soldados más han sido recuperados del término de Andilla.
La falta de ayudas económicas para la realización de pruebas de ADN imposibilita que los restos de algunos de estos combatientes puedan recuperar su nombre y con ello su dignidad histórica.
«La diferencia entre ellos y otras víctimas cuyas pruebas de ADN sí han sido subvencionadas es que murieron siendo combatientes. Al igual que los represaliados, aquellos que lucharon en el frente y nunca regresaron han sido durante décadas los grandes olvidados de nuestra Democracia», como han subrayado desde la Asociación de Familiares de Víctimas del Frente de Levante.
Todas las víctimas del Franquismo «merecen ser reconocidas y tratadas con dignidad. Por eso la Asociación de Familiares de Víctimas del Frente de Levante pide a las instituciones públicas que sigan dotando de los medios necesarios a quienes trabajan por esta dignificación, sin hacer diferencias entre víctimas».
«Esas diferencias no existieron entre quienes combatieron hombro a hombro por la defensa de la libertad. Tampoco existen entre los familiares, que tantas décadas después, siguen manteniendo la esperanza de devolverles esa dignidad arrebatada, con algo tan elemental como un nombre», han finalizado.
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