El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Chiva, Gonzalo Guillén, ha pedido de nuevo la dimisión del actual alcalde de la localidad, José Manuel Haro, «al que piden 8 años de inhabilitación y cuatro de prisión por prevaricación y falsificación de documento público». El representante del PSPV-PSOE ha pedido a la máxima autoridad local que no condene a todo el pueblo «a pasar por el bochorno de ver a su alcalde sentado en el banquillo», donde está previsto que declare el próximo 15 de julio.
De esta manera se pronunció Guillén ante el pleno del ayuntamiento, una petición a la que se sumaron el resto de grupos políticos en la oposición, cuyos responsables se negaron a participar en las votaciones de las propuestas del equipo de Gobierno al considerar ilegítima la representación de Haro como presidente del pleno municipal. Durante su intervención, el portavoz socialista pidió a Haro que comparezca en los juzgados «a título personal y no como representante de Chiva», al tiempo que le pidió que pagara «los gastos de este juicio y libre a este municipios del pago de sus malas artes». Para Guillén, «ni los ciudadanos, ni los empresarios, ni los trabajadores de la localidad merecen que el nombre de su pueblo se encuentre envuelto en los escándalos que han provocado sus actos y su gestión al frente del gobierno».
Con el apoyo del público asistente, Guillén ha cerrado su intervención reiterando la petición de dimisión para Haro, al que acusó de gobernar «a golpe de escándalos y pleitos, que pasan por la expulsión rastrera de un concejal, el escándalo de las oposiciones de la Diputación y una querella por malversación de fondos públicos, hasta su trato de favor con la familia Cotino recalificándole terrenos de manera más que cuestionable mientras el pueblo atraviesa la situación más complicada de su historia sin que se planteen soluciones por parte del equipo de Gobierno para afrontar los problemas reales de los ciudadanos, como es el desempleo».
Por otro lado, el portavoz del PSPV-PSOE también ha cuestionado el hecho de que Haro haya decidido dimitir de sus cargos dentro del PP por respeto a sus militantes y le ha pedido que respete «también a sus vecinos». Así, ha apuntado que la decisión de dimitir de su cargo en el partido «parece una tomadura de pelo que no contribuye para nada a la regeneración democrática que su líder, Alberto Fabra, dice abanderar».
«Del mismo modo, es oportuno recordar que tanto Haro como varios miembros de su equipo de gobierno tendrán que enfrentarse, además, a una querella presentada por el PSPV-PSOE de la localidad por presunta malversación de caudales públicos y prevaricación al haber cobrado durante años dietas por desplazamientos que no habrían realizado con el fin de incrementar sus salarios», recuerdan desde la oposición.
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