El PSPV de Benaguasil ha denunciado que el arquitecto del ayuntamiento de la localidad, Manuel Juesas Sierra, posee en propiedad hasta un total de tres empresas inmobiliarias inscritas en el registro mercantil que se dedican a la compra, venta, cesión, construcción o promoción de fincas rústicas y urbanas en esta localidad del Camp de Túria, cuyo domicilio social está situado en la calle Palacio de Benaguasil. El grupo socialista asegura que esta situación «es un claro ejemplo de connivencia y permisividad por parte del alcalde, José Joaquín Segarra, del Partido Popular».
El empleado público figura como miembro del consejo de administración en al menos tres mercantiles y es al mismo tiempo poseedor también de participaciones en las citadas sociedades. En algunas de ellas aparece con el cargo de administrador único, aunque en todas también figuran a su vez sus hijos en los respectivos consejos de administración, con sus participaciones monetarias, según los datos hallados en el registro mercantil de Valencia a fecha 6 de noviembre pasado. Las empresas están vigentes actualmente y funcionan a pleno rendimiento.
El grupo socialista de Benaguasil desvela que las sociedades mercantiles se constituyeron entre los años 2005 y 2008, en pleno «boom» urbanístico bajo el que se redactó el plan general de la localidad —todavía en espera de su aprobación por parte de la Generalitat— en el que se dispuso la recalificación de 6’5 millones de metros cuadrados del término municipal y la construcción de hasta 15.000 nuevas viviendas.
El PSPV de Benaguasil considera «éticamente reprobable» que este trabajador público posea en régimen de propiedad «sociedades privadas, junto a su familia, dedicadas a una actividad relacionada directamente con su función pública hasta el punto que puede valerse de información confidencial o reservada derivada de su tarea en el ayuntamiento» al tiempo que ha acusado al alcalde, Joaquín Segarra, del PP, por consentir «esta actividad privada de este empleado contratado por el consistorio a través de un procedimiento negociado sin publicidad que le ha valido incluso el cuestionamiento de la intervención y la secretaría municipal».
La primera sociedad creada fue «Arquitectura e Inversiones Mediterráneas S.L.» que se formalizó con fecha 21 de diciembre de 2005 con el objeto social de compra venta de inmuebles y mediación en el mercado inmobiliario. El empleado público figura en el consejo de administración con el cargo de vocal y posee en calidad de propietario 250 participaciones por un valor nominal de 9.000 euros en total. El valor total de la sociedad es de 36.000 euros, a razón de 36 euros cada acción y, al igual que la otra sociedad, también se ha fijado su domicilio social en la calle Palacio de Benaguasil.
A continuación, nació la sociedad «Solares e Inmuebles del Mediterráneo Sociedad Limitada» se creó el 19 de enero de 2006 con un valor social total de 6.200 euros, a razón de 62 euros cada acción. En este caso Manuel Juesas Sierra resultó designado administrador único «por tiempo indefinido» y es poseedor de 70 participaciones con un valor de 4.340 euros cada una de ellas. El domicilio también se ha ubicado en la calle Palacio de Benaguasil, al igual que en los otros casos.
Por último, la familia del arquitecto constituyó el 16 de enero de 2008 la mercantil «Alquiler de Inmuebles del Mediterráneo Sociedad Limitada» y en ella aparece Manuel Juesas Sierra como administrador solidario del consejo de administración —junto a dos hijos más— tras desembolsar en la misma un total de 1.100 participaciones sociales a 1 euro cada una de ellas. Su razón social figura en la calle Palacio de Benaguasil y el capital social se ha fijado en 3.300 euros, a 1 euro cada participación.
El PSPV de Benaguasil ha deplorado la falta de «ética» del alcalde de la localidad «porque prefiere mirar para otro lado y permitir al técnico de urbanismo compatibilizar ambas actividades, la pública como arquitecto municipal en el ayuntamiento y la privada con la gestión de tres sociedades inmobiliarias dedicadas a la compra venta de fincas rústicas y urbanas».
Entre los «logros urbanísticos» alcanzados por el alcalde y bajo el diseño y la supervisión del arquitecto a lo largo de los últimos años cabe destacar el centro de día para mayores que no se utiliza tras invertir en él 1’2 millones de euros, la piscina cubierta cerrada por falta de adjudicatario tras un periodo de construcción de más de 15 años y 3 millones de euros invertidos, las constantes reformas de la avenida de Montiel o, por último, la discoteca B Club donde se han dedicado 1,5 millones de euros o el plan general paralizado por la Generalitat Valenciana desde el año 2007 por su desaforada previsión constructora, con una previsión de más de 15.000 nuevas viviendas.
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