Buñol transforma un espacio degradado en un mirador con ayuda de la Diputación

Salvador Enguix junto a Joaquín Masmano.
Salvador Enguix junto a Joaquín Masmano.
Salvador Enguix junto a Joaquín Masmano.
Salvador Enguix junto a Joaquín Masmano.

La Diputaciónde Valencia ha finalizado una serie de trabajos para transformar un antiguo espacio degradado de Buñol en un mirador y una zona de ocio mediante un convenio con el ayuntamiento de 44.600 euros.

El diputado de Medio Ambiente, salvador Enguix, junto con el alcalde de la localidad, Joaquín Masmano, y el jefe del departamento, Emilio Sanchis, ha comprobado los resultados de esta actuación, que ha servido para “recuperar una zona que estaba muy deteriorada con el fin de poder aprovecharla”, ha declarado el diputado provincial.

El estado de degradación de este solar de amplias dimensiones del camino del Cuco, ubicado en las proximidades del casco urbano, “se concretaba en la presencia de un depósito de agua antiguo y en desuso así como vertidos puntales de enseres y maleza”, ha informado Enguix, al tiempo que ha asegurado que la Diputación de Valencia “ha respondido a una necesidad, ya que la zona estaba muy abandonada y degradada, y ahora los vecinos disponen de un mirador que también puede utilizarse para celebrar actos culturales”.

Según ha explicado el diputado provincial, las actuaciones que se llevan a cabo desde la Diputación de Valencia para la recuperación de espacios degradados, “permiten convertir zonas degeneradas en desuso en puntos de utilidad pública, incrementando su atractivo natural y sus posibilidades de disfrute”.

Concretamente,  “la entidad provincial ha invertido un total de 35.674 euros –el 80% del coste total- para recuperar el camino del Cuco  que supone una importante vía de comunicación para los vecinos de Buñol, puesto que este histórico camino enlaza el campo de fútbol, el Parque San Luis que alberga el auditorio al aire libre y la Ermita de San Luis con el manantial de la Cabezona”, ha apuntado el diputado provincial.

“La parcela –ha aseverado- se encontraba ocupada por un antiguo depósito de agua en muy mal estado de conservación y había perdido su funcionalidad”, explica Enguix.

Así, la actuación ha consistido en derribar las instalaciones del depósito y transformar este espacio en un mirador natural sobre el valle y el auditorio de San Luis hacia el Alto jorge.

Obra acertada

Por su parte, el primer edil destaca que se trata de una obra “simple pero muy acertada y muy bien gestionada”. “El principal problema radicaba en el depósito de más de 81 años que estaba derruido, por lo tanto era una escombrera donde no se veía el paisaje”, señala.

En este sentido, Masmano cuenta que el renovado espacio acoge un graderío con una capacidad de unas 200 personas para celebrar actos culturales.

 

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