La Diputación reabre la CV-580 entre Dos Aguas y Millares

El próximo martes 27 de diciembre se reanudarán los trabajos de acondicionamiento de la vía para su puesta a punto definitiva.
El próximo martes 27 de diciembre se reanudarán los trabajos de acondicionamiento de la vía para su puesta a punto definitiva.
El próximo martes 27 de diciembre se reanudarán los trabajos de acondicionamiento de la vía para su puesta a punto definitiva.
El próximo martes 27 de diciembre se reanudarán los trabajos de acondicionamiento de la vía para su puesta a punto definitiva.

La Diputación de Valencia ha reabierto este viernes de manera provisional la CV-580 entre Dos Aguas y Millares para facilitar los desplazamientos que se puedan producir estas fechas con motivo de las fiestas navideñas. Está previsto que la circulación se regule con sentidos alternativos mediante una señalización adecuada y el uso de semáforos en la zona. El área de Carreteras prevé que a partir del martes 27 de diciembre se reanuden los trabajos de acondicionamiento para la puesta a punto definitiva del trazado.

Con la reapertura de esta carretera se recupera la normalidad en la red viaria provincial tras el último temporal de lluvias, ya que la CV-428 de acceso a Cortes de Pallás volvió a funcionar este jueves 22 de diciembre. Durante estos días de fuertes lluvias, el Servicio de Conservación y Explotación de Carreteras ha atendido 150 incidencias en 59 vías de la red provincial, que cuenta con 1.800 kilómetros de trazado.

En este episodio de fuertes lluvias y viento, el Servicio de Conservación y Explotación de Carreteras ha movilizado a 60 operarios ininterrumpidamente para reforzar la seguridad, de manera que ha podido atender las diferentes emergencias producidas en la red viaria. En el operativo se incluye al personal especializado en el manejo de maquinaria como retroexcavadoras o camiones grúa, que han tenido que intervenir en las incidencias que revestían especial gravedad.

Las incidencias más habituales han sido las inundaciones puntuales o generalizadas de las carreteras, así como en cruces de cauces que se han desbordado por insuficiente capacidad de drenaje; los desprendimientos de tierra y bloques de los taludes de las carreteras, que requieren de acciones preventivas como la adoptada en Cortes de Pallás para minimizar riesgos y evitar situaciones críticas y muchas veces inesperadas; y la caída de árboles en las calzadas, donde el viento tiene una especial influencia.

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