Maria Josep Amigó, vicepresidenta de la Diputación de Valencia, ha visitado estas fiestas de Fallas la segunda ciudad más importante en la organización de esta fiesta, Alzira, y en compañía de los alzireños y de su alcalde, Diego Gómez.
Amigó ha estado también acompañada, además de por los miembros de la corporación municipal, de la secretaria autonómica de Hacienda, Clara Ferrando, y de la diputada en el Congreso de los Diputados por Castelló, Marta Sorlí. Amigó, en su compromiso por promover y apoyar a la candidatura de las fiestas de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad que evaluará la Unesco en los próximos meses, ha remarcado que Alzira, con 35 comisiones falleras y más de un siglo de tradición, “es clave” para que la Unesco reconozca las Fallas. Alzira figura en la candidatura junto con Valencia, Gandia o Torrent.
Por su parte, Diego Gómez, ha querido remarcar que “Alzira es la segunda potencia mundial en cuanto a fallas después de Valencia y estamos trabajando para que entre todos logremos el reconocimiento de la Unesco”. Así, el recorrido ha empezado en la Falla Camí Nou, de la sección especial y una de las comisiones más numerosas y tradicionales de la ciudad. Allí han almorzado con todos los miembros de la falla. Posteriormente, se han acercado a la Falla de la Plaza de la Malva que tiene la particularidad de haber ganado el premio al mejor “Llibret de falla” de todo el País Valenciano, y es ya el tercer año consecutivo que lo consigue, este año bajo el título Tro d’avís 2016.
Posteriormente han presenciado la Mascletà y han comido en la Falla de la Plaza del Forn la tradicional “Cassolà”.
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