Riba-roja se sitúa en tercer lugar en la provincia de València en potencia generada por la energía fotovoltaica con 6.882 kilovatios  

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Los datos ofrecidos por la Generalitat Valenciana refrendan la apuesta del equipo de gobierno por el impulso de las energías renovables en la lucha contra las adversidades del cambio climático 

El término municipal de Riba-roja de Túria se ha situado en el tercer lugar en el ranking de las localidades valencianas con una mayor potencia instalada de energía procedentes de las placas fotovoltaicas. La localidad alcanza, de esta forma, los 6.882’71 kilovatios generados por esta energía limpia y renovable y su sustitución por las tradicionales en su objetivo por luchar contra las graves consecuencias del cambio climático. 

Los datos ofrecidos por la Dirección General de Industria, Energía y Minas, dependiente de la conselleria d’Economia, relativos al tercer trimestre de este año 2022 no dejan lugar a dudas sobre la apuesta de Riba-roja de Túria en potenciar la instalación de las placas fotovoltaicas que se coloca en tercer lugar, con los citados 6.882 kilovatios, sólo superado por Paterna en segundo lugar y 8.062 kilovatios y la capital València con otros 10.048 kilovatios. 

En el caso de Riba-roja de Túria la totalidad de su potencia instalada procede por completo de la energía generada por las placas fotovoltaicas mientras que en otros municipios valencianos se completa la energía fotovoltaica con otros sistemas existentes actualmente, como es el caso de la cogeneración o la hidroeléctrica. En el caso de la provincia de València, en la actualidad se han instalado 16.431 puntos de generación de energía fotovoltaica que llega a producir hasta 184.713 kilovatios.

En el ámbito de la Comunitat Valenciana, se han alcanzado ya las 42.860 instalaciones de autoconsumo repartidas por las tres provincias, Alicante, Castelló y València, con una generación de energía instalada que se sitúa, actualmente, en los 568’22 megavatios. Además, sobre el total existen 965 instalaciones que corresponden a autoconsumo colectivos, según los datos publicados por la Generalitat Valenciana sobre el tercer trimestre de este año. 

Las estadísticas dadas a conocer apuntan a algunos de los usos a los que se dedican los kilovatios de energía fotovoltaica generada como la industria, el uso doméstico, las viviendas particulares, los almacenes, los locales o las oficinas. También destacan otros usos como los locales de espectáculos y actividades recreativas, los locales de uso sanitario o el estacionamiento de uso público, además de usos comunes e instalaciones de recarga de vehículos eléctricos. 

En cuanto a la personalidad jurídica de las instalaciones autorizadas destacan las personas físicas, las sociedades de responsabilidad limitada, las sociedades cooperativas, las sociedades anónimas, las corporaciones locales, las comunidades de bienes y herencias, los organismos públicos, las congregaciones e instituciones religiosas, las sociedades civiles o los órganos de la administración del Estado y de las Comunidades Autónomas, entre otros.  

En el caso de Riba-roja de Túria, cabe destacar que el ayuntamiento ha destinado en lo que llevamos de año 2022 un total de 99.230 euros en ayudas económicas destinadas a la instalación de energía fotovoltaica para autoconsumo y para el fomento de la economía local en las viviendas y edificios del término municipal. Estas ayudas se otorgan a través del sistema de concurrencia competitiva que supone el cumplimiento estricto de una serie de requisitos para obtener las citadas ayudas. 

Con esta asignación económica han resultado beneficiarios un total de 68 expedientes administrativos de los propietarios de viviendas y de las comunidades de vecinos de Riba-roja de Túria que lo solicitaron a través del proceso marcado en las bases reguladoras aprobadas al efecto. Estas medidas benefician a viviendas, edificios residenciales, así como las instalaciones destinadas al comercio minorista y establecimientos de prestación de servicios al consumidor final. Las bases reguladoras contemplan que la cantidad a subvencionar en cada uno de los proyectos presentados es de 500 euros por cada kilovatio instalado y un límite de potencia de 3 kilovatios en total, de forma que la cantidad máxima concedida asciende a los citados 1.500 euros.

El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, ha afirmado que estos datos de la Generalitat “son el resultado exacto del trabajo y la labor que desde el equipo de gobierno hemos llevado a cabo desde el ayuntamiento en nuestro empeño por fomentar las energías renovables, limpias y respetuosas con el medio ambiente y, por tanto, en reducir las emisiones de dióxido de carbono que tanto daño realiza en nuestro entorno, principal causante del cambio climático que padecemos; por ello, las subvenciones que hemos aprobado son muy importantes para ayudar a abaratar la factura económica a nuestros vecinos”.